NoteQuest. Partida 1. Primera aventura.

Pizca llevaba una vida tranquila en Elvandar, quizás demasiado tranquila. Entre los muros seguros de la ciudad, sus días transcurrían entre pergaminos, polvo de libros y el ocasional regateo en el mercado, donde su instinto felino y su sonrisa traviesa le permitían vender cualquier baratija al doble de su valor. Era una existencia cómoda, sin grandes riesgos, y precisamente por eso, asfixiante.

NoteQuest. Partida 1. Preparación.

Nacida en las callejuelas del barrio de los tintoreros, Pizca aprendió desde pequeña a moverse con sigilo, a escuchar más de lo que hablaba, y a distinguir el tintineo de una moneda desde el otro lado del mercado. Su madre, una curandera errante de la raza de los Persona Gato, murió joven, dejando a Pizca al cuidado del maestro Alther, un archivista jubilado con más libros que paciencia.