En el mundo normal, el verano es una época de ocio y diversión. Pero en Scopicity, el verano es una época de estrés y peligro. El calor provoca sequías que agotan los recursos y provocan conflictos. Las nubes crean tormentas que desencadenan relámpagos y granizo. Las plantas atraen a competidores que luchan por el territorio. Los animales crean crías que aumentan la demanda y la presión. El verano es una época de lucha y competencia para los seres microscópicos de la Scopicity.
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Las 13 cartas de la temporada
- Un picnic se lleva a cabo en el mundo de tamaño normal, cerca de la ubicación de Scopicity.
- Alguien está iniciando un negocio y pide voluntarios para trabajar junto a ellos.
- ¡Capa de sustancia blanca en polvo que en realidad es muy molesta porque llega a todas partes!
- Una o más criaturas son expulsadas de su hogar debido a algo más que no podemos ver.
- Alguien intenta algo realmente arriesgado, pero por suerte para ellos, los resultados salen bien.
- Un viejo amigo nuestro llega de visita trayendo a su familia también.
- Alguien tiene una nueva mascota que tiene una gran personalidad.
- Una nueva heladería abre sus puertas en la ciudad, sirviendo deliciosas bolas hechas con frutas frescas de verano.
- Una querida celebridad llega de repente a nuestro pequeño mundo.
- Una o más criaturas son expulsadas de su hogar debido a algo más que no podemos ver.
- Una población animal crece exponencialmente y empezamos a tener un excedente de ganado. [+1SS]
- Extrañas luces aparecen de repente a la vista por la noche sobre tierras lejanas.
- Se descubre algo especial en tierra cercana (posiblemente bajo el agua)
Semana 1
El verano comenzó con un espectáculo fascinante para los habitantes de Micropolis Prime. Desde lo alto del cielo, enormes sombras se proyectaban sobre la ciudad, acompañadas de ecos distantes y vibraciones constantes en el suelo. En el mundo de tamaño normal, un par de chavales estaban comiéndose un paquete de gusanitos mientras charlaban, completamente ajenos a la pequeña civilización que observaba desde abajo.
Para los todos los habitantes de Micropolid Prime, y en general para todo el mundo microscópico, el hecho de «comer gusanitos con un colega» se convirtió en un evento de observación natural, mientras caían copos de comida desde el cielo que recogieron y se convirtieron en una fuente inesperada de recursos.
Nixil Plumabronce registró cada detalle, maravillado por todo lo que estaba ocurriendo, e intando buscar una explicación. Finalmente llegó a la conclusión de que Zythal’Quen, el gran dios de este mundo, los estaba observando y obsequiándolos con maná caído desde los cielos.
Semana 2
En la ciudad, un joven llamado Krex Salmiremo decidió abrir un negocio innovador: una empresa de reciclaje de esporas. Su idea era recolectar los restos de plantas y esporas no utilizadas y convertirlos en biomasa utilizable para la ciudad.
Fluglo Dulcipluma, siempre en busca de ingredientes frescos, se ofreció como voluntario, ayudando a crear un sistema de compostaje que no solo reducía desechos sino que también proporcionaba nutrientes esenciales para las nuevas cosechas.
La población se concienció pronto de la necesidad de reciclar sus residuos, y Reciclaje Salmiremo pasó a ser una de las industrias más prósperas de la ciudad.
Semana 3
Una mañana soleada, los habitantes de Micropolis Prime despertaron para encontrar su ciudad cubierta por una fina capa de polvo blanco. El polvo se colaba en cada rincón, cubría las plumas de los Pluroxith, irritaba las branquias de los Branquiluvis y se adhería a las espinas venenosas de los Vorlithrax. Nadie sabía de dónde provenía, pero resultaba extraordinariamente molesto, ya que cada paso levantaba pequeñas nubes blancas que flotaban en el aire.
Nixil Plumabronce, siempre observador, notó que el polvo blanco tenía un aroma ligeramente salado y una textura granulada. Tras recolectar muestras y analizarlas en el Laboratorio Verde de la ciudad, descubrió que se trataba de residuos microscópicos de maíz y sal.
Aunque el polvo blanco no era peligroso, sí provocaba incomodidad generalizada. Los Guardianes del Microcosmos organizaron una limpieza comunitaria, utilizando microherramientas para barrer y almacenar el polvo en pequeños recipientes. Pronto, los habitantes encontraron usos creativos para este residuo: mezclándolo con agua filtrada, podían crear un pegamento natural, útil para reparar estructuras y construir refugios temporales; aplicándolo sobre la piel en unas cantidades razonables, se convertía en una protección contra la humedad, como una especie de talco.
Fluglo Dulcipluma, siempre atento a nuevas recetas e innovaciones, lo incorporó en sus elaboraciones, creando un pan de maíz salado que se convirtió en un éxito inesperado.
Semana 4
En el barrio de rascacielos bioluminiscentes, varias familias de comenzaron a abandonar sus hogares. Aunque no había un depredador visible, las plumas sensoriales de Nixil detectaron una vibración continua en la zona. Tras estudiar el fenómeno, se descubrió que el agua subterránea estaba cambiando de dirección, creando pequeños terremotos microscópicos que hicieron que las estructuras de los edificios fueran inestables.
Las familias desahuciadas fueron acomodadas en distintos edificios gubernamentales a la espera de una solución para su situación, que no dejaba de ser muy preocupante.
Semana 5
Un inventor llamado Tovik Espinador decidió probar un sistema de iluminación pública utilizando cristales bioluminiscentes como fuente de energía. Aunque algunos temían que la energía liberada pudiera ser peligrosa, el experimento fue un éxito rotundo.
Las calles de Micropolis Prime se iluminaron con un suave resplandor azul, aumentando la seguridad nocturna y permitiendo que el Horno Rodante repartiera panes nocturnos sin problemas.
Semana 6
El explorador Kelor Zummbrillo, un viejo amigo de Nixil, regresó a la ciudad con su familia. Kelor había estado investigando nuevas esporas medicinales en un mundo acuático cercano y trajo consigo muestras valiosas.
Durante su visita, compartió historias de sus aventuras con su amigo Nixil, que cada vez añoraba más salir a conocer mundo.
Semana 7
Una microbio comerciante, llamada Yixa Brillafina, trajo de sus viajes una criatura diminuta llamada «Glimmi», una especie de polilla bioluminiscente. Aunque era pequeña, Glimmi tenía una personalidad encantadora, siguiéndola a todas partes y reaccionando a la música.
Pronto, Glimmi se convirtió en una celebridad local, y el parque organizó «Noches de Luz», donde los habitantes se reunían para ver a la polilla danzar bajo las nuevas luces de Tovik Espinador.
Semana 8
El calor del verano inspiró a una microbio emprendedora llamada Lina Frutilla, que tenía un talento especial para combinar sabores. Abrió una heladería artesanal llamada «Frío Esporal», ubicada cerca del parque. Su especialidad eran las bolas heladas hechas con frutas frescas y un toque de cristales refrescantes de las cuevas bioluminiscentes.
El éxito fue inmediato. Los habitantes de Micropolis Prime hacían fila para probar los sabores únicos, como Esporamango, Cristalberry y Nebulamelón. Incluso Nixil Plumabronce dedicó una entrada en su diario a este nuevo fenómeno culinario, destacando cómo la comida también podía ser una forma de exploración sensorial.
Semana 9
La ciudad recibió la inesperada visita de Vorna Luzdelva, una famosa conocida por sus crónicas visuales sobre la vida en otros ecosistemas microscópicos. Vorna había viajado a Micropolis Prime para filmar un documental, atraída por la historia de la Esporosis Viscosa y la recuperación de la ciudad.
Durante su estancia, Vorna entrevistó a Fluglo Dulcipluma sobre el éxito de El Horno Rodante, capturó imágenes de las «Noches de Luz» con Glimmi y acompañó a Nixil en una breve expedición a las cuevas bioluminiscentes. Su documental, titulado «La Luz en lo Pequeño», prometía poner a Micropolis Prime en el mapa microscópico global.
Semana 10
En las zonas residenciales, algunas criaturas pequeñas (principalmente esporánidos luminosos del zoológico) comenzaron a abandonar sus hogares de repente. Al principio, se pensó que podría ser un depredador microscópico, pero las plumas sensoriales de Nixil revelaron algo más intrigante: campos magnéticos fluctuantes bajo el suelo.
Estos campos provenían de una fuente desconocida. Los Guardianes del Microcosmos tomaron medidas para proteger a las criaturas desplazadas, mientras Nixil preparaba una expedición subterránea para descubrir la fuente del fenómeno. En secreto, Nixil estaba disfrutando mucho de la situación, ya que en parte esta expedición podría calmar el ansia de aventuras que tenía Nixil. Reunión a un pequeño equipo de exploración:
- Lira Branquihierba: Experta en botánica subacuática, que podría identificar si las vibraciones estaban relacionadas con cambios en las capas freáticas.
- Tovik Espinador: Inventor que tenía dentro de sus creaciones un escáner de vibraciones capaz de mapear las ondas sonoras a través del suelo.
- Kelor Zummbrillo: Aunque su visita inicial era personal, el viejo amigo de Nixil se unió a la expedición, aportando su conocimiento sobre esporas medicinales, que podrían ser útiles en caso de descubrir un recurso nuevo.
Equipados con linternas bioluminiscentes, herramientas de excavación y provisiones del Horno Rodante de Fluglo Dulcipluma, el grupo se aventuró en un túnel natural cerca del parque.
A medida que avanzaban, las vibraciones se volvían más fuertes y regulares. El escáner de Tovik reveló un patrón rítmico, como si una máquina invisible latiera bajo la tierra.
Tras excavar con cuidado, el equipo descubrió un espacio subterráneo cavernoso donde las paredes estaban cubiertas de un musgo bioluminiscente, que emitía un suave calor. En el centro de la caverna, encontraron la fuente de las vibraciones: una antigua estructura cristalina, posiblemente un artefacto natural vinculado a la deidad guardiana Zythal’Quen.
El artefacto pulsa con una energía rítmica, provocando las ondas sonoras que habían afectado a la ciudad. Al acercarse, Nixil notó que el artefacto estaba rodeado de esporas flotantes, las mismas que Kelor había estado investigando en su mundo acuático.
El equipo determinó que el artefacto no era peligroso, sino que actuaba como un regulador natural del flujo de agua subterráneo, manteniendo las cuevas bioluminiscentes en equilibrio hídrico. Sin embargo, un deslizamiento de tierra reciente (posiblemente causado por la gota de lluvia gigante de la primavera) había alterado su posición, provocando el desequilibrio.
Tras registrar el hallazgo, Tovik utilizó su ingenio mecánico para ajustar el artefacto, restaurando su frecuencia natural. El agua comenzó a fluir nuevamente en la dirección correcta, estabilizando los rascacielos bioluminiscentes en la superficie.
Semana 11
En el Parque de Micropolis Prime, una población de microgusanos de seda experimentó un crecimiento exponencial. Estos pequeños seres, conocidos por su habilidad para producir fibras resistentes, comenzaron a reproducirse rápidamente gracias a las condiciones favorables del verano.
El excedente de microgusanos trajo consigo un aumento el potencial comercial de la ciudad, ya que sus fibras de seda se utilizaron para crear ropas resistentes, materiales de construcción y herramientas médicas. Fluglo, siempre creativo, incluso experimentó con la seda microbiana en sus productos horneados, creando envoltorios comestibles que ayudaron a preservar los alimentos durante más tiempo.
Semana 12
Durante una de las Noches de Luz, los habitantes de la ciudad observaron luces danzantes en el horizonte. A diferencia de las bioluminiscencias naturales de Micropolis Prime, estas luces tenían un resplandor intermitente y se movían en patrones geométricos.
Mientras algunos microbios observaban con curiosidad y otros con miedo, Nixil Plumabronce sintió que las luces no eran un fenómeno natural, sino señales directas de la deidad guardiana Zythal’Quen. Convencido de que el dios lagarto se comunicaba con su pueblo, Nixil organizó una reunión en el Parque de Micropolis Prime, donde compartió su teoría con la comunidad.
Nixil explicó cómo las luces danzantes podrían ser mensajes divinos, tal vez guías espirituales o advertencias sutiles. La idea de un mensaje celestial resonó profundamente en la población.
La realidad supera con creces la ficción: en el mundo real, alguien había arrojado un juguete luminoso que se había puesto en funcionamiento con el golpe contra el suelo. Las luces tenían fecha de finalización, marcada por la cantidad de batería que le quedase a las pilas del susodicho juguete.
Semana 13
El verano cerró con un descubrimiento extraordinario. En las aguas cercanas al puerto, los Guardianes del Microcosmos encontraron un jardín submarino bioluminiscente, oculto bajo una capa de sedimentos. Este ecosistema acuático albergaba especies únicas de plantas y criaturas que podían aportar nuevos recursos y oportunidades comerciales a la ciudad.
Además, las plantas acuáticas parecían filtrar naturalmente el agua, ofreciendo una solución sostenible para el filtrado de las aguas residuales de los residentes de Micropolis Prime.
Fin del verano. Cálculo de la puntuación de Supervivencia.
Puntuación de supervivencia de la estación: 88
Nivel de dificultad: media (80)
Puntuación de supervivencia para los Pluroxith: 18 – 1 = 17
Puntuación de supervivencia para los Branquiluvis: 18 – 1 = 17
Puntuación de supervivencia para los Vorlithrax: 26 – 1 = 25
Y acabó el verano. Seguimos sin peligro de extinción en nuestro micromundo.
Hasta luego, gente!
Scopicity. Partida 1. Primavera 1 en Micropolis Prime
¡Ya es primavera en Micropolis Prime! Scopicity.
Scopicity. Partida 1. Otoño 1 en Micropolis Prime
El otoño, decadente y deprimente, causa estragos en el ánimo de toda la ciudad. Scopicity.