15/11/2024. Micro Architects. Un rival algo torpe

Condiciones iniciales.

Nací y crecí en esta ciudad.

Acabo de terminar mis estudios sobre arquitectura y me he enterado de que hay un concurso para construir un gran barrio completamente a las afueras de la ciudad.

Solo yo me he presentado al concurso, pero los dirigentes quieren utilizar una inteligencia artificial para diseñar el nuevo barrio. Dicen que es más «barata» y que seguramente lo hará mejor que yo.

Tengo que conseguir superarla, ya no solo por el monto ecónomico que supondría ganar, sino porque con ello me puedo hacer un nombre entre los arquitectos de la zona y conseguir que mi carrear despegue.

Si preferís no quedaros a la partida e ir directamente a lo que opino yo del juego, podéis hacer clic aquí. Pero nunca sabréis si finalmente conseguí ganar el concurso…

Comenzando el diseño

¡Madre mía como empieza la cosa!

Yo me estoy centrando más en la parte más pavimentada del barrio, con sus calles bien definidas y llena de asfalto, mientras que AIDA se está centrando más en la parte verde.

Cada uno de nosotros ha conseguido un monumento en uno de sus barrios, pero es cierto que AIDA ha conseguido llenar dos de las ocho parcelas, mientras que yo he rellenado solo una. Eso le da una ligera ventaja, puesto que tiene más opciones de puntuar hasta el final de la partida.

Aún así, he conseguido algo de ventaja sobre AIDA en las evaluaciones emitidas al final de la ronda.

En la mitad de la carrera.

Esta ronda se presenta igual de complicada para mí.

Yo sigo con mi solitaria Torre Eiffel mientras que AIDA ya cuenta con cuatro monumentos en su barrio: un faro, un arco del triunfo, un monumento al meeple de Lincoln y una cosa grande como de cables de alta tensión (eso no sé lo que es).

Lo bueno es que he conseguido completar al menos tres manzanas de mi barrio, con lo que he conseguido una segunda carta de objetivos que me dará puntos al menos durante dos rondas. AIDA no ha conseguido completar ninguna manzana más, así es que bien.

Final del proyecto

Llega la recta final.

Estamos muy igualados.

Cada vez se va notando más que AIDA tiene mucho más monumentos en su barrio que nosotros. Nosotros nos hemos centrado en la consecución de objetivos, pero hemos obviado la consecución de monumentos, ya que nos estorbaban un poco con los objetivos… puede que no haya sido la mejor estrategia, porque no solo no los puntamos nosotros, sino que le dan muchos puntos a AIDA.

Finalmente, conseguimos construir tres monumentos (frente a los 5 de AIDA). Como he dicho anteriormente, esto también implica que AIDA no consiga estos puntos para sí misma.

Puntuación final.

En la valoración de los resultados obtenidos, conseguimos exactamente la misma puntuación. El desempate para decidir quién es el mejor arquitecto se determina en función del número de monumentos construidos: a menor cantidad de monumentos, mejor, así es que finalmente ¡nosotros nos llevamos el contrato para ser el arquitecto del nuevo barrio de la ciudad!

Ha sido una lucha encarnizada, pero finalmente hemos salido victoriosos.

Si en el modo sencillo ya he tenido estos problemas, no me quiero ni imaginar en modos más complicados la paliza que me pueden dar…

El tema de los monumentos, que en principio me pareció un poco tonto y prescindible, me he dado cuenta que no, que estaba muy equivocada en este punto. No es que nosotros consigamos puntuación, sino que evitamos que el contrario puntue, porque realmente, la mayoría de los puntos de AIDA son gracias a los monumentos que va poniendo.

Me quedan más partidas elevando la dificultad y aplicando los conocimientos adquiridos para ver qué tal va la cosa.

¡Hasta la siguiente partida!